“Hace 33 años quisimos crear, desde el corazón, una loca, apasionante y personal historia dedicada a la conserva. La pasión y tesón de José Antonio Vallano, mi padre, fundador y creador de BROTO, me enseñó e inculcó que nuestra conservera debía tener “alma”, ese inequívoco espíritu que nos distingue al ser humano y nos hace ser únicos.

Mi padre siempre me ha enseñado fuertes principios y valores. En base a ellos he ido creciendo, construyendo y aprendiendo desde la propia experiencia como seña y sello de vida. Tras 18 años al frente de BROTO puedo decir que soy un afortunado haciendo lo que me apasiona. BROTO es parte de mi vida y puedo compartirlo. Lograr que el cliente pueda sentir y valorar ese latido con nosotros forma parte de nuestra excelencia.

Nuestras miras son seguir llegando al alma de las personas a través de su paladar. Forma parte de nuestra inspiración diaria y de futuro. Actualmente estamos trabajando intensamente en ese don de la comunicación para que todos conozcan quiénes somos y nuestros auténticos valores de marca. La excelencia en la conserva gallega es nuestro leitmotiv y queremos que tú conozcas el porqué.

En BROTO nos dirigimos a aquellas personas que buscan algo distinto y que conectan con una filosofía de cómo hacer las cosas. Hemos querido crear una auténtica cultura de marca. Creo que el reconocimiento llegará pronto y nos ilusiona esa idea. Trabajamos por un todo. BROTO tiene un gran corazón y una gran fuerza interior. Todo es posible.